Conocer qué hace diferente tu proyecto de su competencia es algo fundamental para proporcionar una base sólida y duradera a tu modelo de negocio. ¡Veamos cómo detectar tus ventajas competitivas de forma fácil!
La ventaja competitiva es uno de los conceptos clave y básicos de la estrategia empresarial. Consiste simplemente en aquella característica que te permite tener unos mejores resultados que el resto de tus competidores. Por lo tanto, es algo de tu proyecto que te coloca por delante de los demás.
Como veíamos en el análisis DAFO, las ventajas competitivas son características que nos dan cierta superioridad sobre nuestros competidores. Las ventajas competitivas pueden ser internas o externas:
- Ventaja competitiva interna: cuando la superioridad de tu proyecto se basa en los costes de fabricación, administración o gestión de producto o servicio, buscando un coste de producción inferior al de tu competencia.
- Ventaja competitiva externa: cuando la superioridad de tu proyecto se basa en aquellas cualidades de tu producto o servicio que proporcionan un gran valor para tus usuarios, lo que permite que éstos acepten un precio de compra superior en tus productos, por encima de los productos de tu competencia.
Ejemplos de ventajas competitivas que puedes tener en tu proyecto:
- Un producto único o innovador, difícil de imitar por tu competencia, que te permite diferenciar tu proyecto del resto de clase.
- Una marca de gran valor que te permite que cualquier producto que saques al mercado tenga una buena acogida por tus usuarios.
- Un proceso productivo eficiente que te permite producir los mismos productos que tu competencia, pero con un coste menor.
- Una tecnología que te permita producir tu producto con un rendimiento mejor que el de tu competencia.
- Un equipo de personas altamente cualificadas que te permite tener una gran productividad o proporcionar un excelente servicio a tus usuarios.
- Una patente que te permite explotar un determinado producto sin preocuparte de que la competencia también haga lo mismo.
- Un sistema de gestión que te permita recoger y procesar rápidamente los pedidos, para brindar una rápida atención a tus usuarios.
- Una plataforma que permite que tu equipo y tus usuarios se encuentren en un ambiente cómodo y funcional.
- Una ubicación estratégica que permita que tus usuarios puedan localizarte fácilmente y visitar tu proyecto con mayor frecuencia.
- Un sistema de distribución eficiente que permita que tus productos lleguen a varios puntos de venta, en las mejores condiciones y en el momento oportuno.
Criterios para considerar una ventaja competitiva
Rendimiento
El criterio de rendimiento está directamente relacionado con que seas capaz de poner en valor u obtener rendimiento de dicha característica de tu proyecto. Por ejemplo, si tienes un equipo de profesionales altamente cualificado pero no están realizando las tareas adecuadas, no estás sacando un rendimiento de esta característica de tu equipo, y por lo tanto no estás aprovechando como deberías esta ventaja competitiva.
Sostenible
El segundo criterio para considerar que una característica de tu proyecto sea una ventaja competitiva es que sea sostenible en el tiempo. Es decir, aquellas ventajas competitivas que has detectado en tu proyecto te tienen que permitir obtener su rendimiento durante un periodo de tiempo.
Difícilmente copiable
Por último, si aquella característica de tu proyecto sobre la que estás construyendo tu ventaja competitiva puede ser copiado fácilmente por tu competencia, entonces no estaríamos hablando de una ventaja competitiva real. Ya que cualquiera de tus competidores podría utilizar la también y por lo tanto, tal y como veíamos al principio, no estaría colocando tu proyecto por delante de ellos.
Resumiendo…
Así que ya tienes deberes para hacer. Siéntate, coge papel y boli y piensa en las características de tu proyecto… ¿Cuáles son tus ventajas competitivas? Y según todas las que hayas detectado… ¿cuál es la ventaja distintiva que puede ser tu propuesta de valor?
Y si tienes cualquier duda, recuerda que puedes contactar conmigo para resolver tus problemas. ¿A qué esperas para buscar las ventajas competitivas de tu proyecto? Si lo piensas… solo conseguirás mejorar, y en el peor de los casos, habrás aprendido cosas sobre tu proyecto que quizá jamás hubieras pensado… ¡Adelante! 😉
